FLUIR
Al ser consciente de la respiración,
se equilibran los sentidos,
se armoniza el interior,
y se siente ligereza.
Este cuadro esta realizado en septiembre del dos mil veintiuno. Pintado en acrílico y para la elaboración utilicé lana y plumas.
Cuando la sangre fluye, el oxigeno llega a cada rincón de nuestro cuerpo, generando paz interior.
Una forma de conseguir esa calma es haciendo ejercicios de estiramiento. Ejercicios conscientes y serenos, porque al alongarte se desbloquea los caminos internos, con lo cual la sangre llega sin dificultad a todos los puntos, liberando de presión los chakras y relajando el diafragma.
En el momento que te relajas con cada uno de los estiramientos, adormeces al ego y pasas a ser consciente de una realidad sin manipulación; y aunque esa realidad sea complicada, la acoges con positividad, porque donde antes solo encontrabas obstáculos ahora es posible vislumbrar alternativas llenas de soluciones.